martes, 23 de noviembre de 2010


El Héroe de este cuento se batió en lodos y mares de puñalones hasta la hora de cenar.
Exhausto y casi agotado cerró la puerta de su casa de vértigo con goznes de hojalata.
Blandió su enorme cucharona y devoró todo el potage.
Le supo rico.

Pobre Héroe de esta corta historia. No supo el porké de un caldo tan sabroso.
Lágrimas de hiedra y Suspiros al vapor fueron los ingredientes secretos.
Y de noche.
Shh ... "duerme mi bien..."
dESpués se hizo de día y ellos volvieron a soplar.




No hay comentarios: